
La culpa es una emoción que si no sabemos controlar, puede arruinarnos la vida. Los seres humanos somos capaces de sentir culpa por algo que hicimos (o que no hicimos); por algo que estamos (o no estamos haciendo); incluso, por algo que vamos (o no vamos a hacer).
¡Podemos sentirnos culpable por todo! Lo que no es completamente malo, la culpa nos permite reflexionar sobre nuestros actos y aprender de nuestros errores.
El problema es cuando la culpa es excesiva y se convierte en una herramienta de tortura mental o boicot personal. La culpa fuera de control es perjudicial para tu salud mental y emocional y puede provocar:
Baja autoestima: Te hace sentir que no eres lo suficientemente buena o que no mereces ser feliz.

Ansiedad y depresión: Te mantiene en un estado de constante preocupación y tristeza.
Problemas físicos: Puede causar dolores de cabeza, fatiga, problemas digestivos y otros síntomas físicos.
Aislamiento social: En casos más severos, la culpa puede hacerte sentir que no mereces estar rodeada de seres queridos.
La culpa, al igual que todas nuestras emociones, están generadas y limitadas por nuestros pensamientos. Es por esto que nuestra única opción para aprender a gerenciar las emociones es aprendiendo a controlar nuestros pensamientos.
A continuación encontrarás las 4 técnicas que necesitas para superar la culpa:
1. Acepta la responsabilidad: Reconoce tus errores y aprende de ellos. Analiza la situación (sin emociones) y no te castigues por lo que ya no puedes cambiar. “Lo hecho, hecho está”.

2. Perdónate a ti misma: Todos cometemos errores. Es importante aprender a perdonarnos y seguir adelante. Reconocer que no somos perfectos y que tenemos que mejorar es el primer paso para convertirnos en una mejor versión de nosotros mismos.
3. Practica la autocompasión: Sé amable contigo misma y trátate con el mismo cariño con el que tratarías a una amiga. No dejemos que la voz del Boicot Interior tome el control de nuestra conversación. “Debemos ser el adulto que nuestro niño interior necesita”.
4. Enfócate en el presente: No te quedes atascada en el pasado. Concéntrate en el presente y en cómo puedes mejorar tu vida ahora. No sirve de nada perder tiempo pensando en lo que pasó o en lo que pasará. Ahora es el único momento que podemos vivir, ¡no lo desperdicies!
Si te cuesta vencer la culpa y superar tus limitaciones, el Club Tengo Un Plan! es el lugar para ti, con:
Asistencia vía WhatsApp: Un coach estará disponible para apoyarte en cualquier momento que lo necesites.
Plataforma online con recursos: Accede a una biblioteca con videos, artículos, audios y ejercicios para ayudarte a lograr tus metas.
Grupo de apoyo: Conéctate con otras mujeres que están pasando por experiencias similares y deja de sentirte sola en el proceso.
Y mucho más!
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